Ansu Fati, un delantero tan voraz como generoso apadrinado por Messi

El guineano es, junto a Ilaix Moriba, la gran esperanza de la Masia y uno de los jugadores con mayor proyección del mundo.
EDITORIAL
Anssumane Fati no conoció a su padre hasta los seis años . Bori Fati abandonó su Guinea Bissau de origen en 2001, meses antes de que su esposa María De Lurdes Vieira diera a luz a la última perla de la Masia, para buscarse la vida en el sur de España. Allí alternó varios empleos hasta convertirse en el chófer del alcalde de Marinaleda, Juan Manuel Sánchez Gordillo, que resultaría clave a la hora de ayudar a Bori a traer a toda su familia junto a él. Fue entonces cuando se conocieron el uno al otro. "Sabía que le gustaba el fútbol como a cualquier chaval africano pero no que era tan bueno" comentó en la COPE tras el debut de su hijo, que se convirtió en el segundo jugador más joven en estrenarse con el Barcelona, con 16 años, 11 meses y 5 días.
Su familia sigue pellizcándose, no obstante. El joven Ansu llegó a España a principios de 2009 con seis años y lo primero que le pidió a su atareado padre fue que le llevara a jugar al fútbol . Hasta entonces había pateado balones improvisados hechos con calcetines en Guinea-Bissau pero en apenas unas horas había llamado la atención de todos los vecinos y poco después ingresaba en la Escuela Peloteros, un equipo formativo de Herrera, un pueblo situado a una hora de Sevilla . Seguía despuntando y Bori no tardó en recibir la llamada de Pablo Blanco, el director del fútbol base del Sevilla, para incorporarle en 2010 junto a su hermano mayor Braima. Su camino a la gloria ya había empezado pero todavía tocaría sufrir a pesar de que el destino querría que debutara con el primer equipo barcelonista al cabo de una década. Semanas después de su llegada al Sevilla ya eran varios los clubes de Primera Division, con Real Madrid y Barcelona al frente de todos, los que se interesaban por él.
Si los padres de Ansu eligieron al Barcelona fue con la misma motivación que, veinte años atrás, lo habían hecho los padres de Andrés Iniesta . "El Real Madrid nos ofrecía mucho más dinero pero cuando fui a Valdebebas vi que no tenían residencia para los chavales y a pesar de que nos ponían una casa elegimos al Barcelona porque sí disponía de residencia para los chicos" reveló Bori. Monchi, el director deportivo del Sevilla, no tardó en reaccionar y multiplicó la propuesta barcelonista pero la decisión ya estaba tomada . Disconforme con la situación, el Sevilla resolvió no volver a alinearle en 2011 y en 2012 se enfundó la zamarra barcelonista por primera vez en su vida tras las gestiones de Albert Puig para ingresar en el Alevín A azulgrana. Allí conoció a Takefusa Kubo .
A pesar de que Ansu era el más joven del equipo, con el japonés crearon una de las delanteras más letales que se recuerdan en la Masia . Entre los dos se repartieron 130 goles en su primer año se pero la sanción de la FIFA en 2014 truncó la proyección de ambos. Kubo regresó a su país pero Fati decidió quedarse ya que no era uno de los jugadores que había motivado la sanción pero el Barcelona resolvió no alinearle de forma prudencial durante un periodo importante de tiempo para evitar mayores consecuencias . Cuando regresó se rompio la tibia y el peroné en un partido contra el Espanyol pero se recuperó y a los quince años alcanzó el Juvenil B. Allí explotó. José Mari Bakero planteó que abandonara el delantero centro para readaptarse como extremo izquierdo para desarrollar mejor su regate y su capacidad asociativa, de la que hoy goza el Juvenil A, más allá de su facilidad para ver puerta.
Ha alcanzado el primer equipo sin haber debutado siquiera con el filial . Lo ha hecho con el dorsal 31 porque según su entrenador, Víctor Valdés, "para los que somos de la casa, debutar en el Camp Nou con 16 años y con un 31 te dice que es un jugador de élite porque no lo hace cualquiera con ese dorsal, hay muchos dorsales por debajo y eso es que viene de muy abajo" comentó. Ansu está hecho de una pasta distinta al resto . Ernesto Valverde, poco amigo del elogio gratuito, comentó tras su debut que “es un jugador que tiene cualidades, es joven, le hemos visto cosas que nos pueden ayudar: tiene desparpajo, es rápido y encara bien" . El 'txingurri' incluso apuntó que la edad no es problema para contar con Fati ya que "es el jugador más joven que he hecho debutar" pero tiene bien claro que "nos puede dar rendimiento".
Fati asiste, marca y se saca de la chistera jugadas que arrancan los suspiros de los asistentes al Camp Nou, entre los que se encuentran el mismísimo Leo Messi (estuvo lesionado frente a Betis y Valencia). El rosarino disfrutó con Fati como cualquier hijo de vecino y al término del encuentro ante los béticos bajó al vestuario para fundirse en un abrazo con la nueva joya del vivero azulgrana, igual que Ronaldinho Gaucho hizo con él hace tres lustros . Su juego se parece, de hecho, así como su precocidad, su humildad y sus ganas de vivir por y para el fútbol. Su familia regresó a casa "en tranvía" según dijo su padre y él lo hizo en coche junto a su hermano Braima.
Pendiente de conseguir la nacionalidad española, su padre preferiría que, en caso de convertirse en internacional, jugara con Portugal pero el joven Ansu quiere hacero por España. Y por el Barcelona, claro . Es por eso que el club catalán ni titubeó cuando Xavi Simons se marchó al PSG hace un mes . Sabe que tiene a uno mejor, mucho más motivado y que aceptó renovar hace un mes. Desde entonces su cláusula de rescisión es de 100 millones de euros pero si sigue así ni duda cabe que dentro de pocos meses el club volverá a revisar su contrato. En otras palabras, la historia de Ansu Fati no acaba de empezar. Pero falta muchísimo para que acabe.