El castigo a Costa, el más severo desde que Pepe pateó a Casquero en el suelo
Competición ha castigado con ocho partidos de sanción a Diego Costa, delantero del Atlético de Madrid. Cuatro por insultos al colegiado Gil Manzano y otros cuatro por agarrarle del brazo. El castigo es el segundo más grave en la reciente historia del campeonato de Liga. Sólo dos partidos menos de sanción de los que recibió el madridista Pepe después de ser expulsado por agredir y patear a Javier Casquero en un partido contra el Getafe, en el que también insultó al colegiado y propinó un puñetazo al azulón Albín. Por esas acciones, Pepe fue castigado con diez partidos de sanción: cuatro por la agresión a Casquero, cuatro por la de Albín, uno por la roja que vio al cometer el penalti previo y otro por los insultos proferidos hacia los árbitros. Ahora a Costa le han caído ocho. Sólo dos menos de los que le cayeron al madridista en el año 2009.
En su día, Cristiano Ronaldo recibió cinco partidos de sanción por empujar a De Burgos Bengoetxea, árbitro del partido de ida entre el Barcelona y el Real Madrid. Éste le había mostrado la segunda amarilla por "simular" Su sanción, como en el caso de Costa, estaba reflejada en el artículo 96 (“Agarrar, empujar o zarandear, o producirse, en general, mediante otras actitudes hacia los árbitros (...) suspensión de cuatro a 12 partidos”).
Otro castigo ejemplar lo vivió en sus carnes Simeone, en la Supercopa de España de 2014, ante el Real Madrid. El entrenador del Atlético recibió ocho partidos de sanción, tras ser expulsado por Fernández Borbalán. Dos fueron por protestar la decisión del árbitro, uno por aplaudir al equipo arbitral, otro por quedarse en la grada para ver el partido y no en el vestuario y cuatro por el artículo 96: darle unas collejas al cuarto árbitro.
Hay otro precedente, el de Marko Livaja: fue castigado con cinco partidos de sanción siendo jugador de la UD Las Palmas en la Liga 2016-17. En un partido ante el Alavés, vio la roja directa por “dar una patada, estando el balón en juego, con el uso de fuerza excesiva” a Marcos Llorente. El croata pidió ecplicaciones por su roja agarrando al árbitro del hombro. Eso añadió cuatro partidos de sanción añadidos a la roja directa.