¿Quién es Anthony Taylor, el árbitro del Juventus contra Atlético de Madrid de la UEFA Champions League?
El colegiado inglés impartirá justicia sobre el césped del Juventus Stadium y ningún español ganó con él en la máxima competición continental.
Juventus y Atlético de Madrid se miden este martes en uno de los partidos más atractivos de la jornada en la Champions League. Será en Turín, donde el árbitro del partido será el inglés Anthony Taylor. Nacido el 20 de octubre de 1978 (tiene 39 años), es internacional desde 2013 y pita en la Premier League desde 2010.
Taylor ha dirigido en dos ocasiones al Atlético de Madrid Madrid y los precedentes con él no han sido buenos. El Atlético de Madrid empató ante el Astana 0-0 en 2015 y perdió por 4-0 ante el Borussia Dortmund en 2018. Tampoco otros equipos españoles, ya que el Barcelona empató el único partido con él, 0-0 ante el Olympiacos y el Real Madrid cayó por 3-0 en la primera jornada de la fase de grupos de esta edición ante el PSG en el Parque de los Príncipes.
De hecho, el Sevilla es el único club que ganó un partido con el árbitro inglés en la Europa League ante la Lazio, ya que tampoco pudieron ganar el Athletic y el Valencia con él.
Por su parte, la Juventus sí ganó su único partido con Taylor como árbitro en la Champions League en un duelo de la fase de grupos de 2016 ante el Dinamo de Zagreb, un duelo en el que la vecchia signora venció por 2-0 en casa,
El encuentro más importante que le ha tocado dirigir es el que reunió al Chelsea con el Arsenal en la final de la FA Cup de 2017. Sin embargo, muchos recuerdan a Taylor por el incidente que tuvo precisamente con el técnico del Arsenal, Arsene Wenger, durante un partido que los Gunners jugaron contra el Burnley.
En esa ocasión, Taylor era el cuarto árbitro, pero tuvo que ver cómo un nervioso Wenger lo fue a buscar tras un final polémico (dos penaltis en los minutos finales). Después de ser expulsado, el preparador francés empujó dos veces al colegiado británico, diciéndole en dos oportunidades "que te follen". Eso le costó a Wenger una sanción de cuatro partidos y 25.000 libras.
